
Fuente: Gestión
La empresa Altamesa ha dejado oficialmente de ser socio de Petroperú en la explotación del Lote 192, el yacimiento petrolero más grande del país, ubicado en la región Loreto. Este retiro se da en un contexto de paralización de más de cinco años en la operación del lote, lo que ha generado pérdidas estimadas en más de 1,200 millones de dólares en ventas no realizadas.
La situación del Lote 192 se ha convertido en un problema crítico para la industria petrolera nacional. Desde que el Estado otorgó su administración a Petroperú en 2021, no se ha logrado concretar su reactivación, a pesar de que en los últimos diez años el yacimiento pudo haber producido alrededor de 18 millones 250 mil barriles de petróleo. Esta falta de producción no solo representa un perjuicio económico, sino que también afecta el abastecimiento de crudo para la refinería de Talara, que depende de fuentes nacionales para operar con eficiencia.
El rol de Altamesa y su salida del proyecto
Altamesa se había convertido en un socio estratégico clave para Petroperú en el desarrollo del Lote 192. La empresa privada aportaría capital y tecnología para reactivar la producción, mientras que Petroperú asumía un rol operativo. Sin embargo, fuentes del sector señalan que la falta de avances concretos en la puesta en marcha del yacimiento y la crisis financiera de Petroperú habrían sido factores determinantes en la decisión de Altamesa de retirarse del proyecto.
Según información recogida por Gestión, la salida de Altamesa deja a Petroperú con la total responsabilidad sobre el futuro del Lote 192. No obstante, la petrolera estatal atraviesa una delicada situación económica, con deudas significativas y una reducción en su calificación crediticia, lo que limita su capacidad de inversión.
Además, se ha señalado que la empresa estatal no ha ejecutado los montos previstos para la reactivación del lote. Mientras que se había estimado una inversión de 150 millones de dólares para retomar la producción, hasta noviembre de 2023 solo se había ejecutado 10 millones de dólares. Esta falta de inversión refuerza la incertidumbre sobre si Petroperú podrá asumir el reto en solitario o si buscará un nuevo socio estratégico.
Consecuencias y perspectivas
El retiro de Altamesa deja un escenario incierto para la industria petrolera nacional. La falta de producción en el Lote 192 impacta directamente en la disponibilidad de petróleo para la Refinería de Talara, lo que obliga al país a importar mayores volúmenes de crudo en un contexto de precios internacionales fluctuantes.
Expertos del sector advierten que la inoperatividad prolongada del lote también afecta a las comunidades de la zona, ya que el desarrollo de actividades petroleras genera empleo y contribuciones económicas para las poblaciones locales. Sin una pronta reactivación, las oportunidades de desarrollo en la región seguirán postergadas.
Por ahora, el futuro del Lote 192 queda en manos de Petroperú y del Gobierno, que deberán definir una estrategia clara para su reactivación. La gran pregunta es si la petrolera estatal buscará un nuevo socio, si logrará asegurar financiamiento para operar en solitario, o si el yacimiento continuará paralizado, acumulando más pérdidas económicas y estratégicas para el país.