
Fuente: Gestión
Lima, Perú – Los mercados financieros globales reaccionaron positivamente al anuncio de Estados Unidos de postergar por 90 días la imposición de aranceles adicionales a China. Esta decisión, que inicialmente generó fuertes caídas en las bolsas y un fortalecimiento del dólar, provocó un repunte significativo en las bolsas de valores y los precios de los metales, mientras que el dólar experimentó una depreciación.
Tras conocerse la noticia, las principales bolsas de valores a nivel mundial revirtieron las pérdidas iniciales. Wall Street cerró la jornada con alzas notables: el Dow Jones subió 1.7%, el S&P 500 avanzó 1.2%, y el Nasdaq Composite registró un incremento del 1.7%. En Europa, la tendencia fue similar, con el Euro Stoxx 50 y el Ibex 35 español mostrando ganancias importantes. En Latinoamérica, los mercados también se vieron impulsados al alza.
La decisión de la administración Trump de aplazar la entrada en vigor de los nuevos aranceles, que inicialmente estaban programados para el 1 de septiembre, fue interpretada por los inversores como una señal de menor intensidad en la guerra comercial entre las dos mayores economías del mundo. Este respiro generó un clima de mayor optimismo y apetito por el riesgo en los mercados.
Metales preciosos y dólar reaccionan en direcciones opuestas:
El anuncio también tuvo un impacto directo en el mercado de materias primas. Los metales preciosos, que habían actuado como refugio seguro ante la incertidumbre comercial, experimentaron una corrección a la baja. El oro, que había alcanzado máximos en varios años, retrocedió ante la disminución de la aversión al riesgo. De manera similar, la plata también registró pérdidas.
Por otro lado, los metales industriales, sensibles al crecimiento económico global, mostraron un repunte. El cobre, el zinc y el aluminio se beneficiaron de las expectativas de una menor escalada en las tensiones comerciales, lo que podría aliviar las preocupaciones sobre una desaceleración económica mundial.
En el mercado de divisas, el dólar estadounidense, que se había fortalecido en las jornadas previas ante la incertidumbre global, experimentó una depreciación. Los inversores, al percibir un menor riesgo en los mercados, optaron por deshacerse de activos considerados refugio seguro, lo que ejerció presión a la baja sobre la divisa estadounidense frente a otras monedas importantes como el euro y el yen.
Perspectivas y cautela en el horizonte:
A pesar del alivio inmediato que generó la postergación de los aranceles, analistas y expertos del mercado mantienen una cautela moderada sobre el futuro de la guerra comercial. Si bien la decisión de Trump fue bien recibida, no implica una resolución definitiva del conflicto. Las negociaciones entre Estados Unidos y China continúan, y la posibilidad de nuevas tensiones y medidas arancelarias en el futuro sigue latente.
Omar Marrouque E., analista de mercados, señaló que si bien la pausa en los aranceles genera un alivio en el corto plazo, la incertidumbre sobre la dirección futura de la negociación comercial seguirá siendo un factor de volatilidad en los mercados financieros.
Desde la perspectiva local, Félix Olivares, de BTG Pactual Perú, estimó que el dólar podría encontrar un nuevo rango de fluctuación entre S/ 3.65 y S/ 3.72 ante la menor aversión al riesgo global. Sin embargo, advirtió que cualquier recrudecimiento de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China podría generar nuevamente presiones al alza sobre la divisa estadounidense.
Impacto en la inversión extranjera:
Inversionistas extranjeros en Perú han manifestado una reacción variada ante la política comercial estadounidense y la pausa en los aranceles. Si bien el alivio en las tensiones comerciales es visto como una noticia positiva que podría mejorar el sentimiento de los mercados y la inversión a nivel global, la incertidumbre a largo plazo sobre la política comercial de Estados Unidos sigue siendo un factor de preocupación.
En este contexto, los fondos internacionales que operan en países de la región y que aumentaron sus posiciones en dólares durante la incertidumbre, podrían buscar rebalancear sus portafolios, lo que podría generar cierta volatilidad en el mercado cambiario local.
A pesar de la pausa en los aranceles, los mercados se mantienen atentos a las próximas señales y desarrollos en las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China. Cualquier indicio de un avance significativo hacia un acuerdo podría generar un mayor optimismo y un impulso adicional a los mercados. Por el contrario, nuevas tensiones o la reimposición de aranceles podrían desencadenar nuevamente episodios de volatilidad y aversión al riesgo a nivel global.
En el corto plazo, los inversores seguirán de cerca los datos económicos de ambas potencias y cualquier declaración oficial que pueda ofrecer pistas sobre el futuro de la guerra comercial. La volatilidad seguirá siendo una característica del mercado mientras persista la incertidumbre sobre este frente crucial para la economía global.
